ESRS: qué son y cómo aplicarlas en tu empresa
El ecosistema empresarial es diverso, complejo y heterogéneo. Hay empresas de todos los tamaños y sectores, y cada una tiene un impacto ambiental, social y de gobernanza diferente. El problema, hasta ahora, es que resulta extraordinariamente difícil imputar los impactos a cada empresa porque no se usaban estándares comunes. Los ESRS (European Sustainability Reporting Standards), parte integral de la Directiva de informes de sostenibilidad corporativa (CSRD) vienen a dar solución al reto de medir.
Índice:
- ¿Qué son los estándares ESRS?
- Importancia de las normas ESRS en sostenibilidad
- ¿Cómo se clasifican los ESRS?
- Objetivos de los European Sustainability Reporting Standards (ESRS)
- ¿Cómo preparar tu empresa para los ESRS?
¿Qué son los estándares ESRS?
Los estándares ESRS son un conjunto de normas de presentación de información sobre sostenibilidad tanto ambiental como social y de gobernanza. Por primera vez, se pide a las empresas presenten sus números de forma estandarizada de manera que sea posible comparar unas empresas con otras, unos sectores con otros, unos países o regiones con otras. Pero también para tener una métrica actualizada del impacto ambiental realista.
Importancia de las normas ESRS en sostenibilidad
Se dice que lo que no se puede medir, no existe. En la actualidad, solo algunas empresas están midiendo factores de impacto como las emisiones, el buen trato a los trabajadores o una gobernanza saludable. La mayoría de las empresas no aportan datos directos de nada de esto, y de las pocas que sí lo hacen no usan formularios estandarizados, por lo que resulta muy difícil compararlas entre sí o realizar sumas.
Las normas ESRS son críticas porque la Unión Europea necesita agregar toda la información relacionada con el impacto social, ambiental y de gobernanza con el objetivo no solo de minimizar los impactos negativos, sino de ser competitiva a nivel interno y con respecto a otros continentes y grupos de países. Hay que adaptar los mercados a los nuevos estándares demandados por la sociedad.
¿Cómo se clasifican los ESRS?
La estructura de los ESRS generales, los que son para todo tipo de sectores y empresas, se dividen en doce documentos que recogen diferentes ámbitos. Han sido diseñados para que sean tan completos como sea posible:
Aspectos generales, que tiene dos textos:
- ESR1. Requisitos Generales.
- ESR2. Contenidos Generales.
Ambiental (llamados E por environment):
- ESRS E1. Cambio climático.
- ESRS E2. Contaminación.
- ESRS E3. Recursos hídricos y marinos.
- ESRS E4. Biodiversidad y ecosistemas.
- ESRS E5. Uso de los recursos y economía circular.
Gobernanza (G), la ESG clásica:
- ESRS G1. Conducta empresarial.
Social (S):
- ESRS S1. Plantilla propia.
- ESRS S2. Trabajadores de la cadena de valor.
- ESRS S3. Comunidades afectadas.
- ESRS S4. Consumidores y usuarios finales.
El Reglamento Delegado 2023/2772 de la Comisión, que es el que regula estos nuevos estándares, resalta que además de estos modelos generales se crearán formularios específicos para al menos 40 sectores, de forma que estos puedan profundizar en su impacto.
Objetivos de los European Sustainability Reporting Standards (ESRS)
Los objetivos de los European Sustainability Reporting Standards son múltiples. Para empezar, se trata de una herramienta para mejorar la transparencia de la información relacionada con el impacto, especialmente el ambiental. Por ejemplo, las medidas reales de emisiones de gases de efecto invernadero no coinciden con las declaradas por las empresas europeas. Esto puede deberse a que no se mide siempre de la misma forma.
También sirve como elemento comparador entre empresas, sectores o regiones. Un inventario de impactos realista puede facilitar que los países dirijan sus inversiones hacia sectores que mejoren la calidad de vida de los ciudadanos. Por ejemplo, servirá para comparar aspectos como el consumo energético o las fuentes de climatización, las empresas que beban de fotovoltaica y usen aerotermia en lugar de calderas de combustión tendrán mejores resultados.
¿Cómo preparar tu empresa para los ESRS?
Para preparar a las empresas de cara a los ESRS, lo primero que hay que ver es si están bajo las obligaciones de la CSRD o Directiva de Informes de Sostenibilidad Corporativa. En principio, todas las empresas grandes, estén o no cotizadas en bolsas de valores. Pero, además, también se incluye a las pymes cotizadas que no sean microempresas siempre y cuando cumplan dos de los siguientes tres criterios: 25 millones de euros o más de balance general, 50 millones de euros o más de volumen neto de negocios, más de 250 empleados durante el año financiero.
Dicho de otra forma, el grueso de las empresas no estarán obligadas durante años, y la gran mayoría de las pymes tampoco. Sin embargo, el objetivo es que esto acabe aplicando a todas las empresas en su momento, estableciendo escalones temporales para ir preparando el mercado de estas mediciones:
- Desde el 1 de enero de 2024, todas las empresas de CSRD.
- Desde el 1 de enero de 2025, empresas grandes que no estuviesen en el CSRD.
- Desde el 1 de enero de 2026, pymes cotizadas. Las pymes no cotizadas podrán participar voluntariamente hasta su obligatoriedad en 2028.
- Desde el 1 de enero de 2028, empresas de fuera de la Unión con negocios en la Unión.